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Algún día habrá que hablar con más detenimiento de Luis Raluy Iglesias, impulsor de toda una familia de artistas y empresarios dedicados al mundo del circo,
como el mismo lo fue.
Por el momento, nos quedamos con la segunda generación circense, bajo los colores del Circo Raluy.
El que ahora conocemos, nace tras la separación de los cuatro hermanos Raluy (Circo Ringland), para formar Eduardo y Francis el Circo Williams, Carlos y Luis
el Circo Raluy, en 1984.
Sus primeras giras (entre 1984 y 1991) transcurren desde Ultramar hasta diversos países europeos, pero su circo “tradicional” no desembarca en España
hasta 1992, viniendo a Zaragoza en el mes de Marzo.
Se instaló en el solar del antiguo cuartel de Hernán Cortés, con acceso también por la calle del Doctor Cerrada. La lluvia, el frío y el mal tiempo en general,
no lograron deslucir su debut.
Con un material menor en número que el actual, cautivaba nada más verlo. Desde las tradicionales caravanas “siamesas”, hasta una más moderna que
todavía no había recibido su decoración definitiva, como veremos más adelante.
En su primer programa nacional y aparte de los números ejecutados por los propios integrantes de la familia, se contrataron otros números de gran calidad.
Irina y Dimitri (reptiles y tarántulas), Maty Muñoz (contorsionista) y los Salsky (rueda de la muerte).
Uno de los platos fuertes, era el contorsionista hindú Sankar (anunciado como “el indio de goma”), que en los carteles (por desgracia no guardé ninguno)
aparecía haciendo sus ejercicios en el capot de una vieja Citroën C4.
Por último, la familia Quirós (como se dice en otro hilo, han actuado para muchos circos, aparte del suyo), aportaba números de fuerza capilar y fieras.
Las fotos que hice dejan mucho que desear, pero están hechas sin flash (para no molestar a los artistas) y con una cámara del “Todo a 100”.
En cualquier caso, las conservo con mucho cariño pues forman parte del “flechazo” que por el Raluy siento, desde hace más de 14 años…
Miguel
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